El quarterback de los Ravens fue el gran ganador de la noche y se el galardón por segunda ocasión en su carrera.
Experimenta el triunfo deslumbrante de Lamar Jackson, el quarterback estelar de los Baltimore Ravens, quien se alzó como el máximo ganador en los NFL Honors, celebrados el jueves por la noche en el Resorts World de Las Vegas.
Lamar Jackson conquistó el prestigioso galardón de Jugador Más Valioso de la NFL por segunda vez en su carrera, un reconocimiento merecido tras liderar a los Ravens hacia una destacada marca de 13-4, asegurando el título de la AFC Norte y el codiciado sembrado N° 1 de la Conferencia Americana.
En un año que comenzó con incertidumbre debido a prolongadas negociaciones contractuales, Lamar Jackson cerró el capítulo del 2023 con cifras impresionantes: 307 pases completos para 3,678 yardas, 24 touchdowns y solo siete intercepciones. Además, su versatilidad en el terreno de juego quedó demostrada con 148 acarreos para 821 yardas y cinco anotaciones.
Este triunfo no es nuevo para Lamar Jackson, quien ya se alzó con el título de Jugador Más Valioso de la NFL en el 2019. Al lograrlo nuevamente, se une a una élite selecta, siendo el décimo primer jugador en la historia en ganar el codiciado premio MVP en múltiples ocasiones. Su nombre se suma a una distinguida lista que incluye figuras como Jim Brown, Johnny Unitas, Joe Montana, Steve Young, Kurt Warner, Brett Favre, Peyton Manning, Aaron Rodgers, Tom Brady y Patrick Mahomes.
Resulta notable que, por onceavo año consecutivo, un quarterback se lleva el galardón de Jugador Más Valioso de la NFL. La temporada baja fue testigo de una negociación que se extendió por 27 meses, culminando con la firma de un contrato multianual con los Ravens. Este contrato, valorado en 260 millones de dólares por cinco campañas, con 185 millones garantizados, posiciona a Lamar Jackson como el jugador mejor remunerado de la liga, con un asombroso salario promedio de 52 millones por año.
Desde su reclutamiento en el draft del 2018 como el turno global N° 32, Lamar Jackson ha dejado una huella imborrable en los Ravens. Su ascenso desde Louisville, donde obtuvo el prestigioso Premio Heisman en el 2016, hasta convertirse en el quarterback con más yardas terrestres en una temporada en el 2019, ha cimentado su posición como una fuerza indiscutible en el mundo del fútbol americano profesional.
